El mundo avanzan a pasos agigantados. Con mayor rapidez aún si nos fijamos en el campo de las nuevas tecnologías. Hoy en día, puedes tener un calendario, un despertador y una agenda en la palma de tu mano. Todo en uno. Estas pequeñas pantallas llamadas SmartPhones se han convertido en la extensión de nuestros brazos y han conseguido sustituir muchos de los inventos que antaño nos parecían totalmente necesarios. Pero todo avanza y el reinado de los SmartPhones empezó a tambalearse con la llegada de las Tablets y las Phablets.

Esta primavera Sony ha sacado al mercado las SmartEyeglass, sus nuevas gafas inteligentes que pretenden hacer la competencia a las GoogleGlass que el todopoderoso Google presentó en sociedad el año pasado. Las dos grandes empresas más innovadoras del siglo apuestan por modelos visuales. ¿Serán las gafas inteligentes la tecnología del futuro? Las ventajas que presentan frente a las pantallas móviles son muchas. Algunas de las más innovadoras son:

– No hace falta teclear. Las articulaciones de la mano son las mayores perjudicadas por el uso manual que tiene la tecnología.
– Gracias a la comunicación verbal del usuario con las gafas inteligentes se puede monitorizar toda la acción a través de la voz. Además, se podrán evitar problemas relacionados con el túnel carpiano.
– También disponen de control gestual para que puedas manejarlas con un simple gesto facial. Una sonrisa, un guiño o fruncir el ceño, servirían para activar las gafas.
– No son exclusivas para una vista perfecta. Tanto las SmartEyeglass como las GoogleGlass adaptan el diseño de las gafas a los ojos de quien los lleva sin importar el número de dioptrías que tengamos.

No sabemos si los SmartPhones, las Tablets, las Phablets o las SmartEyeglass, recién llegadas al mercado, sobrevivirán o serán sustituidas por otro artilugio fantástico que logre satisfacer todas y cada una de nuestras exigencias y necesidades. Lo único que podemos afirmar es que el futuro está en nuestros ojos.